En esta pequeña ciudad aunque parezca mentira albergan numerosas historias. Tantas que bien valdría la pena una visita alternativa conociendo cada una de ellas. Hoy nos centraremos en la leyenda de los hermanos Mastelli.

En concreto hablaremos sobre la historia de Rioba, Sandi y Afani. Estos tres comerciantes llegados de la Morea (Peloponeso) para asentarse en las tierras italianas y dejarnos este cuento que no deja de resultar llamativo.

Para conocer todos los detalles tenemos que trasladarnos al Campo dei Mori, alejado de las zonas más turísticas de la ciudad en el barrio de Cannaregio. Es la zona residencial del auténtico veneciano que busca tranquilidad.

El barrio de Cannaregio está alejado de las zonas turísticas y bien merece una visita.

Venecia cuenta con muchas historias y leyendas. Los puentes, las fachadas de sus edificios y muchos de sus personajes podrían mantenernos varios días sus calles.
Se cuenta que alrededor del s. XII llegaron estos tres hermanos mercaderes a tierras italianas. Los Mastelli empezaron a comercializar con telas y amasar una gran fortuna de una forma tramposa.

Aunque como en toda historia existen pequeñas variaciones, la que tiene más fuerza nos habla de que un día llegó a comprar una cliente (se rumorea que era María Magdalena). Su marido que regentaba una tienda de telas había fallecido y la señora pidió consejo sobre unas telas de buena calidad para su negocio.
Los hermanos en una de sus jugadas para aumentar su fortuna trataron de engañar a la señora vendiendo unas telas de mala calidad. Hablaron con la señora y aseguraron con estas palabras «Que el señor nos transforme en piedra si este no es el mejor tejido de Venecia». Al instante Los Mastelli se transformaron en piedra.

Que el señor nos transforme en piedra si este no es el mejor tejido de Venecia.

Podemos identificar la estatua más importante fijándonos en su turbante donde aparece grabado el nombre de Rioba. La figura a lo largo de los años ha sufrido diferentes restauraciones, una de ellas en su nariz colocando una de hierro en su última etapa.
Sobre todo cobra importancia dentro de las tres estatuas porque sobre esta se cimienta otra leyenda. Se cuenta que quien frote su nariz atraerá esa fortuna. Solo tiene una pequeña dificultad, tendréis que desayunar muchos cola caos o bien dar un buen salto para alcanzarla. Nadie dijo que fuera fácil hacerse rico y es que su nariz está en una zona un poco elevada de la fachada.

Ciertamente si creías que la trama tuviera pocos ingredientes que alimenten la leyenda, se sabe que durante esa fecha si es cierto que existió una familia Mastelli. Ademas si caminas en esta calle veréis que haciendo esquina existe una cuarta estatua que se cree pertenece algunos creen que a su sirviente y otros a un cuarto hermano.
En otras palabras una buena historia que ha permanecido a lo largo de los años entre los venecianos. Una visita recomendada dentro de un barrio diferente a lo típico que solemos visitar cuando vamos a Venecia altamente recomendado.

Te invito a contarme más lugares de leyenda en los comentarios, suscribirte a mi canal de youtube y leer otra de las historias, en esta ocasión, El Puente del Beso en Luarca (Asturias).